Robert Piotrowicz (PL)
El Tamaño del Lamido
Concierto
Robert Piotrowicz es una figura destacada de la música experimental y electroacústica, conocido por su sonido innovador y su enfoque interdisciplinario en la música, el teatro, la radio y el cine. Sus composiciones presentan paisajes sonoros complejos e inmersivos, utilizando sintetizadores modulares y modelado físico, con un enfoque en afinaciones microtonales que amplían los límites auditivos.
Ha publicado álbumes en solitario aclamados como Lasting Clinamen, When Snakeboy Is Dying y Afterlife, que destacan por su combinación única de elementos electrónicos y acústicos. Piotrowicz también compone bandas sonoras para películas y teatro, mejorando las narrativas con su distintivo estilo auditivo. Sus presentaciones en vivo a menudo mezclan improvisación con sonido cuidadosamente estructurado, y crea instalaciones sonoras para galerías de arte contemporáneo.
Su trabajo ejemplifica el poder del sonido como medio artístico, desafiando las experiencias auditivas convencionales. Piotrowicz colabora con varios músicos y artistas visuales, contribuyendo a proyectos notables y cofundador del Festival y Sello Musica Genera para promover la música experimental en Polonia y más allá. Esta iniciativa ha cultivado una comunidad de artistas de vanguardia y actuaciones innovadoras, consolidando su papel en la música experimental contemporánea.
El acto primordial de lamer inspiró a Piotrowicz a escribir esta pieza para el Espacio Sonoro de Casa del Lago UNAM, en formato de audio multicanal 8.1. En la historia privada, pero también en los rituales de muchas culturas y prácticas, lamer se presenta como un acto de apropiación o transición. Puede ser, asimismo, una expresión de rebeldía o un refuerzo de privilegios transmitidos a generaciones posteriores. Esta obra está dedicada a aquellos para quienes lamer sirve de algún modo.
“Quería lamer por mucho tiempo, incluso el fuego, porque quiero someterme a la disolución. No puedo hacerlo de otra manera, tengo que ponerlo en mi boca. Lamer es fluido, quiero lamer objetos significativos porque quiero escuchar. Quiero poder sobre la materia. Como una víbora ciega, pruebo el aire porque no sé qué hay alrededor. Me quedaré parado con la lengua colgando, Lamo un terrón de sal, revisando mi entorno con el rabillo del ojo, esperando que el perro salte a mi garganta. Lameré por tanto tiempo hasta que finalmente sepa, hasta que todos los fragmentos disueltos en mí me lleven más allá del ahora. Hasta el borde del bosque de abedules.” – Robert Piotrowicz
Colaboración con la Embajada de Polonia